Un Paseo por la Toscana a los 30 💙


Hoy cumples 30.


Treinta años de lágrimas fáciles, carcajadas sinceras, consejos brillantes que regalas como quien respira… aunque rara vez te los aplicas a ti misma. Treinta años de vivir con emoción, con nervios, con esa intensidad dulce que no pesa, acaricia.


Compartimos un corazón azul tatuado en el tobillo.

Un dibujo pequeño, pero lleno de todo lo grande: promesa, compañía, verdad.

Una forma de decir “yo estoy”, sin tener que decirlo.


Hace casi siete años que nos encontramos, o mejor dicho, la vida nos encontró. 

Desde entonces, hemos sido eso que no se explica ni falta que hace: dos personas que se cuidan sin ruido, que se entienden con un emoji, que se hacen sitio incluso cuando la vida va deprisa.


Ambas hacemos de pañuelo húmedo sin lágrimas, o quizás unas cuantas sí pero solo por tu parte, yo soy más dura. Nos hemos acompañado en días altos y bajos, con voz temblorosa, con café de por medio, con mensajes larguísimos como podcasts o con silencios que dicen más que mil frases.


Hubo una Toscana, ¿te acuerdas? Que bonito paisaje, con nuestros sombreros y esa foto instagrameable. 

Y solo nosotras sabemos lo que significó.

Fue uno de esos momentos que se quedan en el alma como si se hubieran quedado a vivir allí.


También hubo una salida, una especie de pre-despedida que sonaba: “ una PRE-noche entera, una PRE-noche entera…”

De esas que emocionan y aprietan el corazón a la vez.

Y si me preguntan por la amistad verdadera, pienso en eso: en brindar por el futuro mientras se te  humedecen los ojos por lo que dejamos atrás.


Y también hubo un día blanco. Un vestido. Un altar.

Y yo, de pie, no podía dejar de mirar lo mucho que ansiabas ese momento.

Conocía cada paso que te llevó hasta allí. Y no había duda: estabas justo donde querías estar.

Fui testigo del que hasta ahora ha sido el día más bonito de tu vida.

Y eso no se olvida.


Hoy cumples 30. Y, sí, puede que te pongas nerviosa, que analices de más, y que llores de más también. 

Pero desde fuera, desde este lado, solo puedo decirte esto:


Lo estás haciendo genial. 

Con tu forma de querer sin medida.

Con tu mirada que abraza.

Con tu risa que calma.


Eres un corazón azul con patitas que caminan.

Y por suerte, también con historia.


Feliz cumpleaños.

Feliz todo.

Aquí sigo, como siempre.

Azul.


💙







Publicar un comentario

0 Comentarios